El 14 de abril de 2025, Blue Origin, la empresa espacial de Jeff Bezos, realizó su primer vuelo suborbital con una tripulación exclusivamente femenina a bordo del cohete New Shepard. La misión NS-31 incluyó a la cantante Katy Perry, la periodista Gayle King, la activista Amanda Nguyen, la ingeniera aeroespacial Aisha Bowe, la productora Kerianne Flynn y Lauren Sánchez, piloto y prometida de Bezos. El vuelo duró poco más de 10 minutos, alcanzando la línea de Kármán antes de regresar a la Tierra.
Aunque promocionado como un hito feminista y un avance en la inclusión en la exploración espacial, el vuelo ha sido objeto de críticas por parte de figuras públicas y medios de comunicación. La columnista Moira Donegan de The Guardian argumentó que la misión representó una derrota para el feminismo estadounidense, calificándola de “funeral perverso” para los ideales de progreso científico y equidad de género. Donegan cuestionó la selección de las participantes, señalando que muchas fueron elegidas por su celebridad o conexiones personales, más que por méritos científicos.
La crítica también se centró en la percepción de superficialidad del evento. La columnista Marina Hyde describió el vuelo como una “fiesta en el espacio” que priorizó el glamour y la autopromoción sobre logros significativos en la exploración espacial.
Sin embargo, algunas participantes destacaron por sus contribuciones. Amanda Nguyen, activista de derechos civiles y científica en bioastronáutica, llevó a cabo experimentos relacionados con la salud femenina en microgravedad durante el vuelo. Nguyen, quien previamente trabajó en la NASA, expresó que su participación buscaba desafiar las barreras históricas que enfrentan las mujeres en la exploración espacial.
A pesar de las críticas, las participantes defendieron la misión como un símbolo de inspiración para futuras generaciones. Gayle King afirmó que el vuelo representaba algo más grande que una sola persona o empresa, mientras que Katy Perry lo describió como un momento importante para el futuro de los viajes espaciales comerciales y la humanidad en general.
El vuelo NS-31 de Blue Origin ha generado un debate sobre el significado del empoderamiento femenino en la era de los vuelos espaciales comerciales, cuestionando si tales eventos representan avances genuinos o si son meramente espectáculos mediáticos.
