Starbucks anunció el despido de 1,100 empleados corporativos y la eliminación de cientos de puestos vacantes, en una medida destinada a recortar costos y revitalizar su estrategia empresarial. Brian Niccol, el consejero delegado, comunicó esta decisión a los trabajadores, explicando que forma parte de un plan más amplio llamado “Back to Starbucks”.
Los despidos representan aproximadamente el 7% de los 16,000 empleos de apoyo de la compañía. Se trata de la mayor ronda de despidos en la historia de Starbucks, superando los 350 empleados corporativos que fueron despedidos en 2018.
La empresa notificará los despidos este martes y ha pedido a los empleados de las áreas afectadas que trabajen de forma remota esta semana.
Niccol explicó que Starbucks está simplificando su estructura, eliminando capas y duplicaciones, y creando equipos más pequeños y ágiles. El objetivo es operar de manera más eficiente, aumentar la responsabilidad, reducir la complejidad e impulsar una mejor integración.
Además, Starbucks exigirá a los empleados de nivel de vicepresidente y superior que trabajen presencialmente en las oficinas de Seattle o Toronto tres días a la semana. Los trabajadores de nivel de director o inferior podrán mantener su condición de teletrabajadores, aunque la contratación para futuros puestos requerirá en su mayoría el trabajo presencial.
La decisión de recortar costos se produce en medio de una caída en las ventas y un descenso del beneficio. En el cuarto trimestre, las ventas cayeron un 3,2%, hasta los 9,074 millones de dólares. La cifra más preocupante fue la caída del 7% en las ventas comparables.
Starbucks espera que estos cambios ayuden a mejorar su rendimiento financiero y a posicionar a la empresa para el éxito futuro.